1. Redistribución del trabajo mecánico y repetitivo que en el futuro será realizado por robots
2. Posibilidad de trabajar a distancia y con mejores horarios y salarios
3. Tiempo libre para invertirlo en iniciativas creativas
4. Democratización tecnológica (Ej. internet gratis para todos)
5. Mayor cantidad de información disponible de manera inmediata
6. Reducción de accidentes y muertes en el área de trabajo
Debo confesar que el aura optimista que permeaba en el documental creó en mi cierta desconfianza. No soy de los que miran el avance de la tecnología con desdén, pero tampoco pienso que la convivencia con estos entes mecánicos será toda miel sobre hojuelas. Así que en medio del documental me pregunté: ¿De dónde proviene esta desconfianza generalizada hacia la tecnología y los robots? Una respuesta rápida me lleva a pensar que se trata de ese miedo natural que nos produce el cambio. En la última década el acelerado avance de los artefactos tecnológicos no solo ha transformado las rutinas laborales de los humanos, sino también sus más íntimos patrones de conducta. Piensen por ejemplo, cómo ha aumentado exponencialmente la cantidad de información que le confiamos, no a nuestra memoria, sino a esa memoria externa que se llama teléfono celular. Pero además del miedo al cambio, creo que hay otro factor que ha trastocado la concepción que tenemos sobre la relación con las máquinas inteligentes o con los robots: el cine. La tradición de películas de ciencia ficción en las que los robots son protagonistas ha insistido en la distopía, el apocalipsis y el exterminio. Creo que este tipo de cine ha introducido en la cultura una desconfianza masiva hacia las máquinas y al mismo tiempo las ha presentado muy humanas. Creo que se trata de un miedo que busca al mismo tiempo cierta esperanza, es decir las máquinas son peligrosas, pero si tienen características humanas no son tan extrañas y podemos interactuar con ellas. Sin embargo, en las últimas décadas ha surgido una nueva corriente de cine de ciencia ficción que ve al robot desde una perspectiva mucho más optimista y menos aterradora. Asimismo el elemento humano en los robots se ha reducido y las máquinas comienzan a mostrar lo que realmente son, objetos programados.
Para muestra otras dos mínimas listas bastan:
Películas pesimistas sobre la relación con la tecnología o los robots:
1. Metropolis (1927)
2. Blade Runner (1982)
3. The terminator (1984)
4. Robocop (1987)
5. The Matrix (1999)
Películas un poco más optimistas sobre la relación con la tecnología o los robots:
1. Bicentennial Man (1999)
2. A.I (2001)
3. Iron Man (2008)
4. Robot & Frank (2012)
5. Her (2013)
Les invito a verlas y si ya las vieron, déjenme saber su opinión.